Vuelta a España 2023 - previa etapa 16: desenlace explosivo en Bejes

Arranca la tercera semana de La Vuelta 2023 con una jornada corta y tranquila en su mayoría a través de la costa cantábrica antes de adentrarse hacia los Picos de Europa y culminar en la explosiva ascensión a Bejes (4,8 km al 8,8%). De nuevo, etapa monopuerto y oportunidad para la fuga.

La semana definitiva de La Vuelta 2023 comienza con una etapa llana —y excesivamente corta (120 km)— atravesando Cantabria desde las playas y los acantilados de Liencres, cerca de Santander, hasta el explosivo final en Bejes, en la comarca de Liébana. Un desenlace al estilo Vuelta a España, un tanto decepcionante teniendo en cuenta el gran entorno cántabro, que estrena este pequeño pueblo de poco más de 1.200 habitantes, inmerso en el Macizo de Ándara, como final de etapa en la ronda española. La jornada podría ser una buena oportunidad para la fuga, pues los velocistas no tienen ninguna opción en las rampas finales de hasta el 15% y los ciclistas de la general tratarán de que el día se desarrolle con calma antes del Alto de l’Angliru. 

Hora de salida: 14:40h / Hora prevista de llegada: 17:30h

Recorrido de la 16ª etapa: Liencres - Bejes (120,5 km)

Gran parte de la etapa estará protagonizada por el terreno sinuoso de la costa cantábrica. Aunque mantiene una dinámica llana, el territorio estará repleto de toboganes y pequeños repechos que acumulan cerca de 1.600 metros de desnivel, de los 2.000 m totales de la jornada. Este recorrido en paralelo al mar atraviesa localidades como Torrelavega, ciudad natal de Óscar Freire  —al que conocimos en profundidad en el número 38 de la revista, Suances, Santillana del Mar, Comillas, San Vicente de la Barquera… Una vez los ciclistas lleguen al esprint intermedio de Unquera, a falta de 33 km para la línea de meta, la naturaleza costera dará paso al paisaje montañoso característico en el interior de Cantabria. Esta primera fase debería ser suficiente para que un grupo tratase conseguir cierta ventaja con respecto al pelotón.

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La parte final de la etapa se dirige hacia La Hermida, donde se encuentra el desfiladero más grande de la Península Ibérica. Es en este municipio donde comienza la ascensión final a Bejes (4,8 km al 8,8%), a través de un estrechamiento muy pronunciado que convertirá este punto en el más crítico de la jornada, pues el pelotón volará durante los kilómetros previos buscando la mejor colocación. Las primeras rampas reciben a los ciclistas a una media cercana al 11% y tras un corto descanso en la parte central que divide la subida en dos, se afrontan los últimos 2 kilómetros muy exigentes con tramos que superan de forma sostenida el 14% siguiendo el escarpado transcurso del río Corvera.

Favoritos

Aunque la subida a Bejes se adecúa a las características de un ciclista como Primož Roglič (Jumbo-Visma), la cercanía del Alto de L’Angliru podría apaciguar los ánimos entre los favoritos a la general. A pesar de que la distancia sea tan escasa, lo que podría generar una etapa incontrolable, todo apunta a que una fuga peleará por el triunfo. En este sentido, los sospechosos habituales en las últimas jornadas volverán a ser protagonistas. Ciclistas como Andreas Kron (Lotto-Dstny), ganador en Montjuïc, Jesús Herrada (Cofidis), que se impuso en una etapa muy similar en la Laguna Negra, Sergio Higuita y Lennard Kämna (BORA-Hansgrohe), o Romain Grégoire y Michael Storer (Groupama-FDJ) son algunos de los potenciales candidatos a la victoria.

Imagen de cabecera: Sprint Cycling

 

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