Giro d'Italia 2022 - previa etapa 12: el éxito recae en la fuga

Jornada con más de 2.600 metros de desnivel positivo acumulado y un desenlace que invita a pensar en que los ciclistas especialistas en resolver las escapadas tengan una nueva oportunidad. Muchas alternativas y un final muy abierto.

La intuición será uno de los factores clave para resolver esta etapa en el Giro d’Italia. Una jornada en la que la fuga tendrá muchos visos de salir victoriosa en Genova. Esta ciudad, capital de la región de Liguria, tuvo una estrecha relación con la corsa rosa en un periodo que comprende las décadas de los treinta, los cuarenta y los cincuenta. Sin embargo, ha ido perdiendo protagonismo y ahora regresa al recorrido tras su última aparición en el año 2015, con victoria para Elia Viviani.

En un primer momento, el día podría ser considerado como un punto de nerviosismo más que evidente para los hombres de la general. Era una jornada más corta y contaba con el aliciente del Monte Becco a falta de 20 kilómetros para la meta. Sin embargo, la duodécima etapa ha cambiado su personalidad desde el día de presentación del Giro, ya que esta ascensión final ha sido eliminada y se ha incluido un recorrido mucho más cómodo camino de Genova.

Recorrido de la 12ª etapa: Parma - Genova (204 km)

Al comienzo de la etapa, la ruta va dejando atrás la Llanura Padana y se adentra poco a poco en los Apeninos Septentrionales. Durante más de 90 kilómetros se mantiene una pendiente suave y constante en el valle del Taro, ascendiendo desde los poco más de 100 metros de altitud en Parma hasta los 720 m que marcan el inicio del Passo del Bocco. Este puerto, lugar en el que Wouter Weyland perdió la vida en un trágico accidente durante su descenso en la edición del año 2011, marca un cambio de escenario en la etapa. 

Tras una larga bajada camino del Mar Tirrero, en algunos momentos técnica y rápida, la carrera se introduce en una zona de impás en el valle de Fontanabuona. A continuación, los ciclistas deberán hacer frente a La Coletta (9 km al 4,4%) y el Valico di Trensasco (4,3 km al 8%). Esta última ascensión presenta la dureza suficiente tanto para seleccionar la posible fuga como para tensar la carrera entre los implicados en la general. Se corona a falta de 30 kilómetros para la meta, por lo que será uno de los lugares clave de la etapa antes de adentrarse en la ciudad de Genova bordeando su amplia zona portuaria.

Favoritos

Observando de forma detenida el perfil de la etapa, uno de los primeros nombres que puede venir a la mente es el de Bauke Mollema (Trek-Segafredo). El neerlandés es un corredor de la vieja escuela, de aquellos que todavía se mueven por sensaciones y con un olfato magnífico para interpretar el desarrollo de una escapada. Fue uno de los grandes protagonistas de la jornada que concluyó en Potenza, donde acabó segundo. De nuevo, se abre una oportunidad para su manera de entender el ciclismo y, posiblemente, la tendrá marcada en rojo. 

Fotografía: Trek-Segafredo

Uno de los compañeros de viaje en aquella etapa fue Davide Formolo (UAE Team Emirates). El italiano es también un ciclista inquieto y, aunque igual necesitaria un poco más de dureza, cuenta con un recorrido en el que puede desenvolverse bien para buscar su segundo triunfo de etapa en el Giro d’Italia tras el que cosechó en la temporada 2015 en una jornada de similares características. En el conjunto emiratí, también un ciclista con un perfil algo más explosivo como Alessandro Covi podría tener sus opciones.

El abanico de posibilidades al triunfo es muy amplio en una etapa tan abierta y en el que el perfil de corredor es mucho más ambiguo, sin estar claramente definido. El Quick Step-Alpha Vinyl, tras un arranque sensacional con Mark Cavendish, les está costando ser protagonista los últimos días. A pesar de ello, han seguido insistiendo filtrando a corredores en fuga, como Mauro Schmid, que puede ser una baza más que interesante para esta jornada, o al belga Mauri Vansevenant.

Mauri Vansevenant vistiendo la maglia bianca en las primeras etapas / Fotografía: Quick Step

Una posición ofensiva por la que también tendrá que optar el conjunto Astana-Qazaqstan. No están teniendo la mejor carrera y aunque cuentan con un perfil más escalador que les puede hacer ser protagonista en la última semana, como ya hizo Joe Dombrowski en el Blockhaus, ciclistas más versátiles como Valerio Conti o Fabio Felline podrían buscar su oportunidad en esta etapa. 

Al igual que la dupla del EF Education-EasyPost que forman el ecuatoriano Jonathan Caicedo y el colombiano Diego Andrés Camargo, que ya han estado presentes en fugas. No hay que descartar tampoco a ciclistas como Sylvain Moniquet (Lotto-Soudal), protagonista durante la primera semana, o al joven eritreo Natnael Tesfatsion (Androni-Giocattoli).

Imagen de cabecera: Giro d'Italia

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